Entredichos entre Uribe y Malaga terminó por separar a la primera de la selección nacional de vóley.
“El nivel de Mirtha (Uribe) es de dos puntos, ese es su nivel. Ahora, si ella no se siente así, hay que decirle que baje un poquito las escaleras y que toque piso o le dará soroche'', fueron algunos de los calificativos que Natalia Málaga disparó contra Mirtha Uribe, deportista que fue separada recientemente de la selección nacional de vóley.
Ante ello, la voleibolista no se quedó callada y conversó para hacer su descargo.
''Me enfurece mucho que ella esté haciendo esas declaraciones cuando no son ciertas. No sé porque está contra mí, yo no le hecho nada para que me califique de dos puntos y hacerme quedar como una agrandada. Si eso fuera cierto, entonces los asistentes al Coliseo del Callao, en la última Copa Presidente, no hubieran coreado mi nombre. Los hinchas me pedían que entre a la cancha y nunca dije nada. Pero que la gente te pida, es por algo'', dijo.
''Que yo no juegue es un tema del entrenador, pero que me digan indisciplinada, eso no es cierto. Yo no asistí a los partidos de Tacna porque el propio presidente de
Pero la jugadora también tuvo algunas declaraciones sobre la actitud que toma la asistente técnica, Natalia Málaga, con el resto del equipo.
''Una asistente no debe parecer jugadora y en la selección eso es lo que pasa. Se piensa que insultando a las jugadoras una va a aprender y eso es de otra época'', dijo.
''Se le pide mucho a la jugadora pero ellos (el comando técnico) no se preparan bien. Creo que los que quieren ser entrenadores deben viajar a otros países y ver cómo es el vóley ahora'', agregó
''Es preferible no tocar ese tema. Ella (Cenaida Uribe) sabe en qué posición ponerse. Yo no tengo ningún contacto con ella, es un familiar lejano'', comentó.
Por su parte, la madre de la voleibolista añadió que el cariño de la hinchada a su hija es inmenso y ''hasta la gente se baja de los carros para tomarse y pedirle autógrafos''.
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